La ciudad es sin duda, una de las mayores creaciones humanas. La ciudad es multicolor, es el receptáculo de saberes, de sabores, de ruidos, de música, de olores, de encuentros y desencuentros. Es un escenario donde podemos ver a cada minuto una película diferente. A la ciudad la disfrutamos y la odiamos al mismo tiempo. Es allí donde se aglomera la mayoría de personas, por ello, en parte, enfrentamos tantos problemas, pero tendrá sus encantos, cuando insistimos en quedarnos allí."
viernes, 2 de diciembre de 2011
lunes, 22 de agosto de 2011
Sumar y Construir para el Futuro
Sumar y Construir para el Futuro
21/08/2011
http://www.diariolaregion.net/seccion.asp?pid=29&sid=1562¬id=113567
Hay un atleta que, sin haber ganado una competencia regional y mucho menos nacional, anuncia no sólo que irá a las Olimpiadas, sino que arrasará con todas las medallas de oro. Uno, por supuesto, no quisiera bajarle todo ese ánimo, pero tampoco es cosa de pasar por tonto y venir a creerse algo tan improbable. Lo razonable, más bien, es decirle a este deportista que, en vez de prometer metas tan ambiciosas, vaya haciendo en su propio patio algunos pequeños méritos que demuestren su capacidad.
Me perdonan si alguien creyó que el tema de esta columna era de deportes, pero la verdad es que este cuento me parece el mejor para ilustrar lo que viene haciendo la administración central en torno al grave problema de la vivienda. Para seguir en la onda deportiva: han llegado detrás de la ambulancia en todas las carreras previas, encima, se han gastado una fortuna, nadie sabe muy bien en qué, y ahora dicen que ganarán el gran maratón.
Se nos hace cuesta arriba creerles porque, desde nuestra perspectiva, el problema de la vivienda en Venezuela es un asunto que por su magnitud y complejidad, nos muestra de forma clara la necesidad urgente de reconstruir la unidad nacional, y esa necesidad, no es la prioridad del Gobierno Central.
Hay cosas que debemos hacerlas como un gran equipo o sencillamente no las podremos lograr, ni siquiera con todos los miles de millones que proporciona un barril de petróleo en torno a los 100 dólares.
Con ese ánimo excluyente, el Gobierno Central lleva años en su empeño de que la solución al problema es suya y sólo suya, apenas compartida por aquellos que políticamente no representan una competencia.
Fue así como se desarrolló una historia que comenzó con las Unidades Cívico-Militares del Plan Bolívar 2000, cuyas promesas de viviendas acabaron en sonadas acusaciones de corrupción que, a su vez, no acarrearon los debidos castigos. Luego hemos tenido casi más misiones que la NASA: la Misión Hábitat (2004), la Misión Villanueva (2006), la Misión Barrio Nuevo, Barrio Tricolor (2009) y ahora la Gran Misión Vivienda Venezuela (2011), que con el respaldo y la credibilidad que puede quedar tras una larga cadena de promesas incumplidas, anuncia que multiplicará casi por ocho el promedio de la producción anual de viviendas. Es decir que pasarán de las modestas 33.000 de los últimos 12 años a nada menos que 250.000.
Paralelamente, el Tesoro Nacional ha sufrido una serie de convenios binacionales para el desarrollo de viviendas. Uno de los más antiguos se firmó en 2006 con Uruguay para la construcción de 12.193 casas. De éstas, a diciembre de 2010, se habían construido 11; es decir un éxito del 0,09%. Todo un anti-record. El mismo año se estableció un convenio con Bielorrusia para un complejo de más de 7.000 casas en Aragua, de las cuales sólo han sido parcialmente terminadas 900 a un costo de 300 millones de dólares. Otros acuerdos similares se han establecido posteriormente con Portugal, China, Rusia y Brasil.
Todo lo anterior representa una cantidad de millones que ya hubiéramos querido tener en Miranda para administrarlos con el cuidado con que hemos gastado lo que han dejado estos casi tres años de práctica congelación del Situado Constitucional. A la fecha, más de 106.000 mirandinos se han beneficiado del programa de Certificados Mirandinos de Materiales de Construcción sin deuda, que ha resultado una fórmula muy efectiva para motorizar soluciones habitacionales, donde los mismos mirandinos deciden cómo la quieren y dónde la quieren, esa es la verdadera independencia.
Miles de familias han recibido apoyo para adquirir viviendas en el mercado primario o secundario, para levantar una Vivienda Semilla, para ampliar sus propias viviendas o para acondicionar espacios productivos en el hogar. Hemos dado el respaldo a cientos de mirandinos que quedaron sin vivienda a causa de las lluvias que han caído en los últimos meses.
Más que en grandiosos planes hemos apostado por el protagonismo y la cooperación de los propios mirandinos. Por eso en 2010 emprendimos el plan Soy Propietario, mediante el cual los mirandinos obtienen los documentos de propiedad o títulos supletorios de vivienda. También creamos la Escuela de Constructores Populares de Miranda, en alianza con la Universidad Central de Venezuela (UCV), de la cual este viernes egresaron 59 nuevos Constructores Populares, vecinos que además de convertirse en parte fundamental de la solución para su propio problema de vivienda, han adquirido un oficio productivo, con el que pueden ingresar al mercado laboral.
En Miranda hemos comprobado que más allá de las limitaciones presupuestarias se pueden lograr avances significativos cuando se trabaja con la mente abierta a las alianzas, sin prejuicios políticos de ningún tipo, con el ánimo de sumar y construir y no el de dividir y vencer.
Si se cambia el enfoque que hoy reina, si las instituciones desarrollan la capacidad de prevenir y castigar a quienes convierten los programas de vivienda en fuentes de corrupción, si se suman talentos y voluntades, lo que hoy es un gran problema estoy seguro se podría convertir en una nueva oportunidad para que los venezolanos, sin distinciones de color político, alcancemos un éxito extraordinario del cual todos podamos sentirnos orgullosos.
Henrique Capriles Radonski / Gobernador de Miranda /@hcapriles
21/08/2011
http://www.diariolaregion.net/seccion.asp?pid=29&sid=1562¬id=113567
Hay un atleta que, sin haber ganado una competencia regional y mucho menos nacional, anuncia no sólo que irá a las Olimpiadas, sino que arrasará con todas las medallas de oro. Uno, por supuesto, no quisiera bajarle todo ese ánimo, pero tampoco es cosa de pasar por tonto y venir a creerse algo tan improbable. Lo razonable, más bien, es decirle a este deportista que, en vez de prometer metas tan ambiciosas, vaya haciendo en su propio patio algunos pequeños méritos que demuestren su capacidad.
Me perdonan si alguien creyó que el tema de esta columna era de deportes, pero la verdad es que este cuento me parece el mejor para ilustrar lo que viene haciendo la administración central en torno al grave problema de la vivienda. Para seguir en la onda deportiva: han llegado detrás de la ambulancia en todas las carreras previas, encima, se han gastado una fortuna, nadie sabe muy bien en qué, y ahora dicen que ganarán el gran maratón.
Se nos hace cuesta arriba creerles porque, desde nuestra perspectiva, el problema de la vivienda en Venezuela es un asunto que por su magnitud y complejidad, nos muestra de forma clara la necesidad urgente de reconstruir la unidad nacional, y esa necesidad, no es la prioridad del Gobierno Central.
Hay cosas que debemos hacerlas como un gran equipo o sencillamente no las podremos lograr, ni siquiera con todos los miles de millones que proporciona un barril de petróleo en torno a los 100 dólares.
Con ese ánimo excluyente, el Gobierno Central lleva años en su empeño de que la solución al problema es suya y sólo suya, apenas compartida por aquellos que políticamente no representan una competencia.
Fue así como se desarrolló una historia que comenzó con las Unidades Cívico-Militares del Plan Bolívar 2000, cuyas promesas de viviendas acabaron en sonadas acusaciones de corrupción que, a su vez, no acarrearon los debidos castigos. Luego hemos tenido casi más misiones que la NASA: la Misión Hábitat (2004), la Misión Villanueva (2006), la Misión Barrio Nuevo, Barrio Tricolor (2009) y ahora la Gran Misión Vivienda Venezuela (2011), que con el respaldo y la credibilidad que puede quedar tras una larga cadena de promesas incumplidas, anuncia que multiplicará casi por ocho el promedio de la producción anual de viviendas. Es decir que pasarán de las modestas 33.000 de los últimos 12 años a nada menos que 250.000.
Paralelamente, el Tesoro Nacional ha sufrido una serie de convenios binacionales para el desarrollo de viviendas. Uno de los más antiguos se firmó en 2006 con Uruguay para la construcción de 12.193 casas. De éstas, a diciembre de 2010, se habían construido 11; es decir un éxito del 0,09%. Todo un anti-record. El mismo año se estableció un convenio con Bielorrusia para un complejo de más de 7.000 casas en Aragua, de las cuales sólo han sido parcialmente terminadas 900 a un costo de 300 millones de dólares. Otros acuerdos similares se han establecido posteriormente con Portugal, China, Rusia y Brasil.
Todo lo anterior representa una cantidad de millones que ya hubiéramos querido tener en Miranda para administrarlos con el cuidado con que hemos gastado lo que han dejado estos casi tres años de práctica congelación del Situado Constitucional. A la fecha, más de 106.000 mirandinos se han beneficiado del programa de Certificados Mirandinos de Materiales de Construcción sin deuda, que ha resultado una fórmula muy efectiva para motorizar soluciones habitacionales, donde los mismos mirandinos deciden cómo la quieren y dónde la quieren, esa es la verdadera independencia.
Miles de familias han recibido apoyo para adquirir viviendas en el mercado primario o secundario, para levantar una Vivienda Semilla, para ampliar sus propias viviendas o para acondicionar espacios productivos en el hogar. Hemos dado el respaldo a cientos de mirandinos que quedaron sin vivienda a causa de las lluvias que han caído en los últimos meses.
Más que en grandiosos planes hemos apostado por el protagonismo y la cooperación de los propios mirandinos. Por eso en 2010 emprendimos el plan Soy Propietario, mediante el cual los mirandinos obtienen los documentos de propiedad o títulos supletorios de vivienda. También creamos la Escuela de Constructores Populares de Miranda, en alianza con la Universidad Central de Venezuela (UCV), de la cual este viernes egresaron 59 nuevos Constructores Populares, vecinos que además de convertirse en parte fundamental de la solución para su propio problema de vivienda, han adquirido un oficio productivo, con el que pueden ingresar al mercado laboral.
En Miranda hemos comprobado que más allá de las limitaciones presupuestarias se pueden lograr avances significativos cuando se trabaja con la mente abierta a las alianzas, sin prejuicios políticos de ningún tipo, con el ánimo de sumar y construir y no el de dividir y vencer.
Si se cambia el enfoque que hoy reina, si las instituciones desarrollan la capacidad de prevenir y castigar a quienes convierten los programas de vivienda en fuentes de corrupción, si se suman talentos y voluntades, lo que hoy es un gran problema estoy seguro se podría convertir en una nueva oportunidad para que los venezolanos, sin distinciones de color político, alcancemos un éxito extraordinario del cual todos podamos sentirnos orgullosos.
Henrique Capriles Radonski / Gobernador de Miranda /@hcapriles
martes, 12 de julio de 2011
NO TE RINDAS
No te rindas, aun estas a tiempo
de alcanzar y comenzar de nuevo,
aceptar tus sombras, enterrar tus miedos,
liberar el lastre, retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
continuar el viaje,
perseguir tus sueños,
destrabar el tiempo,
correr los escombros y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frio queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque la vida es tuya y tuyo tambien el deseo,
porque lo has querido y porque te quiero.
Porque existe el vino y el amor, es cierto,
porque no hay heridas que no cure el tiempo,
Abrir las puertas quitar los cerrojos,
abandonar las murallas que te protegieron.
Vivir la vida y aceptar el reto,
recuperar la risa, ensayar el canto,
bajar la guardia y extender las manos,
desplegar las alas e intentar de nuevo,
celebrar la vida y retomar los cielos,
No te rindas por favor no cedas,
aunque el frio queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se ponga y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque cada dia es un comienzo,
porque esta es la hora y el mejor momento,
porque no estas solo,
porque yo te quiero.
Autoría: no muy clara, se presume Benedetti
de alcanzar y comenzar de nuevo,
aceptar tus sombras, enterrar tus miedos,
liberar el lastre, retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
continuar el viaje,
perseguir tus sueños,
destrabar el tiempo,
correr los escombros y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frio queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque la vida es tuya y tuyo tambien el deseo,
porque lo has querido y porque te quiero.
Porque existe el vino y el amor, es cierto,
porque no hay heridas que no cure el tiempo,
Abrir las puertas quitar los cerrojos,
abandonar las murallas que te protegieron.
Vivir la vida y aceptar el reto,
recuperar la risa, ensayar el canto,
bajar la guardia y extender las manos,
desplegar las alas e intentar de nuevo,
celebrar la vida y retomar los cielos,
No te rindas por favor no cedas,
aunque el frio queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se ponga y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque cada dia es un comienzo,
porque esta es la hora y el mejor momento,
porque no estas solo,
porque yo te quiero.
Autoría: no muy clara, se presume Benedetti
lunes, 13 de junio de 2011
SOLEDAD
Ellos tienen razón esa felicidad
al menos con mayúscula no existe
ah pero si existiera con minúscula
seria semejante a nuestra breve presoledad.
Después de la alegría viene la soledad
después de la plenitud viene la soledad
después del amor viene la soledad.
Ya se que es una pobre deformación
pero lo cierto es que en ese durable
minuto uno se siente solo en el mundo.
Sin asideros, sin pretextos
sin abrazos, sin rencores
sin las cosas que unen o separan
y en es sola manera de estar solo
ni siquiera uno se apiada de uno mismo.
Los datos objetivos son como sigue.
Hay diez centímetros de silencio
entre tus manos y mis manos una
frontera de palabras no dichas
entre tus labios y mis labios
y algo que brilla así de triste
entre tus ojos y mis ojos claro
que la soledad no viene sola.
Si se mira por sobre el hombro mustio
de nuestras soledades se vera un
largo y compacto imposible un sencillo
respeto por terceros o cuartos
ese percance de ser buenagente.
Después de la alegría
Después de la plenitud
Después del amor
Viene la soledad.
Conforme pero
que vendrá después
de la soledad.
A veces no me siento tan solo
si imagino mejor dicho si se
que mas allá de mi soledad y de
la tuya otra vez estas vos
aunque sea preguntándote a solas
que vendrá después de la soledad.
Mario Benedetti
al menos con mayúscula no existe
ah pero si existiera con minúscula
seria semejante a nuestra breve presoledad.
Después de la alegría viene la soledad
después de la plenitud viene la soledad
después del amor viene la soledad.
Ya se que es una pobre deformación
pero lo cierto es que en ese durable
minuto uno se siente solo en el mundo.
Sin asideros, sin pretextos
sin abrazos, sin rencores
sin las cosas que unen o separan
y en es sola manera de estar solo
ni siquiera uno se apiada de uno mismo.
Los datos objetivos son como sigue.
Hay diez centímetros de silencio
entre tus manos y mis manos una
frontera de palabras no dichas
entre tus labios y mis labios
y algo que brilla así de triste
entre tus ojos y mis ojos claro
que la soledad no viene sola.
Si se mira por sobre el hombro mustio
de nuestras soledades se vera un
largo y compacto imposible un sencillo
respeto por terceros o cuartos
ese percance de ser buenagente.
Después de la alegría
Después de la plenitud
Después del amor
Viene la soledad.
Conforme pero
que vendrá después
de la soledad.
A veces no me siento tan solo
si imagino mejor dicho si se
que mas allá de mi soledad y de
la tuya otra vez estas vos
aunque sea preguntándote a solas
que vendrá después de la soledad.
Mario Benedetti
viernes, 10 de junio de 2011
Enterrar el corazón
EL NACIONAL - Domingo 29 de Mayo de 2011 Opinión/9
Opinión
Enterrar el corazón
RODOLFO IZAGUIRRE
izaguirreblanco@gmail.com
T enía que haberme dado cuenta en mi adolescencia de que en el concepto de "dictadura del proletariado" se señalaba la presencia de lo que hoy cuestiono y rechazo: el autoritarismo, el pensamiento único, la negación de la democracia, la presencia del dictador. Tenía que entender que dictadura del proletariado era un instrumento perverso para sojuzgar a un proletariado que creía haber conquistado el poder con una revolución. Debí tomar en cuenta las atrocidades que se cometían en la Unión Soviética y en los países bajo su influencia. Con el apoyo de los partidos comunistas en cada país Stalin logró lo que pocos hombres han logrado en el transcurso de una vida: ¡hipnotizar al mundo! Logró que adoradas figuras, como Pablo Neruda, Pablo Picasso, Aragón, le rindieran pleitesía.
Fui víctima, además, de un chantaje maligno y sistemático: no creer en la Revolución Bolchevique o no adherir a ella equivalía a ser cómplice del imperialismo norteamericano; significaba estar del lado de la CIA.
Sabía que existían gulags y manicomios en los que se exterminaba a los disidentes.
Pero hice lo que muchos hicieron durante el nazismo y el socialismo soviético o hacen con el castrismo cubano o con la pesadilla venezolana: ¡mirar para otro lado! Porque con la Revolución Cubana quedamos obnubilados hasta que Fidel Castro dijo que "con la revolución todo, contra la revolución nada" y antes del escarnio sufrido por el poeta Heberto Padilla, preso por escribir poemas considerados contrarrevolucionarios por la autocracia castrista y por la burocracia intelectual que se mueve en la Casa de América y en la Unión de Escritores. El escándalo socavó los pies de barro de aquella revolución y apareció nítida y sin escondrijos la dictadura militar más larga y perversa que haya conocido el continente.
Lo que nunca llegué a perdonar a los cubanos las veces que asistí al Festival de Cine era que me ocultaban el paradero de algunos de mis amigos.
El de Reinaldo Arenas, pongamos por caso: ¡Está en Camagüey! ¡Anda por Santiago! ¡Tengo tiempo sin verlo!, cuando la verdad era que estaba preso en La Habana, en esa cárcel que se ve desde el malecón.
¡Y juré no volver a Cuba! Pero a diferencia de Luisito Aguilé no dejé enterrado mi corazón: ¡me lo traje! Y al traérmelo logré percatarme, finalmente, de que siempre fui un "tonto útil", como llamaban a los ingenuos como yo. Hoy, el chantaje sigue siendo el mismo: rechazar el autoritarismo, la rigidez militar, la exclusión intransigente y la violencia atizada desde el poder político son factores desestabilizadores que merecen castigo. No admitir, no participar o no militar dentro del "proceso revolucionario" significa estar vendido al imperialismo, es decir, ser traidor a la patria.
Cada vez es más numeroso el gremio de los "vendidos"; se hace cuesta arriba condenarlos a todos y el espejo, al dar vuelta, sólo refleja un reducido número de "revolucionarios". El autócrata vive en el temor y se apresura a aplicar leyes que reprimen, doblegan, eliminan ideas, sistemas, derechos, autonomías o, simplemente, otorgan más poder al régimen militar en medio de una corrupción y un narcotráfico que complace a jueces, legisladores y gente de armas. Se da el caso ridículo y absurdo de pretender que los conserjes hayan sido esclavos alguna vez en la historia.
El caudillo militar ya no hipnotiza a nadie; quiere asustar, desea cautivar, cree estar protegido tras un discurso que no interesa a nadie; ha perdido convicción y no hay a su alrededor ninguna figura intelectual relevante, salvo dos o tres poetas que lo adulan y le escriben versos como si vivieran en tiempos de Cipriano Castro o de Juan Vicente Gómez.
¿En dónde enterrarán ellos su corazón?
Opinión
Enterrar el corazón
RODOLFO IZAGUIRRE
izaguirreblanco@gmail.com
T enía que haberme dado cuenta en mi adolescencia de que en el concepto de "dictadura del proletariado" se señalaba la presencia de lo que hoy cuestiono y rechazo: el autoritarismo, el pensamiento único, la negación de la democracia, la presencia del dictador. Tenía que entender que dictadura del proletariado era un instrumento perverso para sojuzgar a un proletariado que creía haber conquistado el poder con una revolución. Debí tomar en cuenta las atrocidades que se cometían en la Unión Soviética y en los países bajo su influencia. Con el apoyo de los partidos comunistas en cada país Stalin logró lo que pocos hombres han logrado en el transcurso de una vida: ¡hipnotizar al mundo! Logró que adoradas figuras, como Pablo Neruda, Pablo Picasso, Aragón, le rindieran pleitesía.
Fui víctima, además, de un chantaje maligno y sistemático: no creer en la Revolución Bolchevique o no adherir a ella equivalía a ser cómplice del imperialismo norteamericano; significaba estar del lado de la CIA.
Sabía que existían gulags y manicomios en los que se exterminaba a los disidentes.
Pero hice lo que muchos hicieron durante el nazismo y el socialismo soviético o hacen con el castrismo cubano o con la pesadilla venezolana: ¡mirar para otro lado! Porque con la Revolución Cubana quedamos obnubilados hasta que Fidel Castro dijo que "con la revolución todo, contra la revolución nada" y antes del escarnio sufrido por el poeta Heberto Padilla, preso por escribir poemas considerados contrarrevolucionarios por la autocracia castrista y por la burocracia intelectual que se mueve en la Casa de América y en la Unión de Escritores. El escándalo socavó los pies de barro de aquella revolución y apareció nítida y sin escondrijos la dictadura militar más larga y perversa que haya conocido el continente.
Lo que nunca llegué a perdonar a los cubanos las veces que asistí al Festival de Cine era que me ocultaban el paradero de algunos de mis amigos.
El de Reinaldo Arenas, pongamos por caso: ¡Está en Camagüey! ¡Anda por Santiago! ¡Tengo tiempo sin verlo!, cuando la verdad era que estaba preso en La Habana, en esa cárcel que se ve desde el malecón.
¡Y juré no volver a Cuba! Pero a diferencia de Luisito Aguilé no dejé enterrado mi corazón: ¡me lo traje! Y al traérmelo logré percatarme, finalmente, de que siempre fui un "tonto útil", como llamaban a los ingenuos como yo. Hoy, el chantaje sigue siendo el mismo: rechazar el autoritarismo, la rigidez militar, la exclusión intransigente y la violencia atizada desde el poder político son factores desestabilizadores que merecen castigo. No admitir, no participar o no militar dentro del "proceso revolucionario" significa estar vendido al imperialismo, es decir, ser traidor a la patria.
Cada vez es más numeroso el gremio de los "vendidos"; se hace cuesta arriba condenarlos a todos y el espejo, al dar vuelta, sólo refleja un reducido número de "revolucionarios". El autócrata vive en el temor y se apresura a aplicar leyes que reprimen, doblegan, eliminan ideas, sistemas, derechos, autonomías o, simplemente, otorgan más poder al régimen militar en medio de una corrupción y un narcotráfico que complace a jueces, legisladores y gente de armas. Se da el caso ridículo y absurdo de pretender que los conserjes hayan sido esclavos alguna vez en la historia.
El caudillo militar ya no hipnotiza a nadie; quiere asustar, desea cautivar, cree estar protegido tras un discurso que no interesa a nadie; ha perdido convicción y no hay a su alrededor ninguna figura intelectual relevante, salvo dos o tres poetas que lo adulan y le escriben versos como si vivieran en tiempos de Cipriano Castro o de Juan Vicente Gómez.
¿En dónde enterrarán ellos su corazón?
miércoles, 4 de mayo de 2011
Desde el año 2010 funciona la Escuela de Constructores Populares en Miranda. Gobierno de Miranda/Facultad de Arquitectura UCV
Participan ciudadados del Estado Miranda con interés de aprender el oficio de la construcción, especialmente aquellos que están incorporados al Programa Hambre Cero. Es un programa del Gobierno de Miranda que se ejecuta a través del Instituto de Vivienda del Estado Miranda (INVIHAMI-Vivienda Miranda)y la Dirección de Desarrollo Social en alianza con la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Central de Venezuela.
viernes, 29 de abril de 2011
Venezuela Ingobernada.....
Pincha aqui>> Venezuela ingobernada.
De compulsiones, espejismos, escalofríos y horizontes.
Por María Teresa Urreiztieta
Psicologo Social
mtu@email.com
De compulsiones, espejismos, escalofríos y horizontes.
Por María Teresa Urreiztieta
Psicologo Social
mtu@email.com
viernes, 22 de abril de 2011
Vivienda Talon de Aquiles de Chávez, por Oscar Olinto Camacho
Entrevista al Arq. Oscar Olinto Camacho
Balances y perspectivas habitacionales
Vanessa Ardila
“CONSTRUCTOR”.No 101. Mayo 2011
Publicación independiente propiedad de ediciones Constructor Report
Es arquitecto con maestría en planificación urbana (1968-1970) en la Architectural Association (conocida también como "AA School of Architecture") y un doctorado en la Universidad de Londres (1978-1982) nos recibió muy amablemente en su casa. Nos habló de su experiencia en la presidencia de Conavi y realizó un interesante análisis sobre la evolución en políticas habitacionales en los últimos años para finalmente brindarnos su perspectiva sobre el problema de vivienda en el país.
PRESIDENCIA CONAVI 1992-1994
¿Cómo llegó a la presidencia de Conavi?, ¿Por qué se retira?
El nombramiento fue muy circunstancial. Le agradeceré siempre al presidente Carlos Andrés Pérez, quien fue quien me nombró. Yo no era adeco ni activista político, simplemente era un miembro activo de la Academia ,y director del Conavi. En ese momento había enfrentamientos entre el sector constructor- inmobiliario y el político con respecto a quién debía ser el presidente de Conavi. Pérez salomónicamente buscó en la Academia para evitar conflictos. Yo trabaja en la Universidad Central de Venezuela (UCV), estaba en el directorio porque el ministro de Desarrollo Urbano de ese momento, Luis Penzini Fleury, me había propuesto en su lista de 1990. y cuando el Arq. Diógenes Mújica, sustituyo a Penzini , el Presidente Pérez me nombró como presidente del CONAVI, sustituyendo al Ing. Alfredo Laffee.
Se definieron buenos proyectos, pero vino el golpe militar de Estado y después tuvimos que renunciar porque el ministro de Desarrollo Urbano del gobierno de Rafael Caldera , Ciro Zaa, quería imponer la centralización de todas las acciones dentro de Conavi, cuando ya estábamos adelantando gestiones para descentralizar el sector vivienda hacia cada uno de los estados. El no podía destituirnos porque fuimos nombrados por decisión presidencial. Según el Ministro Zaa teníamos que centralizar porque no había experiencia en descentralización !!. Después de mi gestión en Conavi regresé a la universidad y a mi consultorìa privada.
La vivienda es un problema local, debe seguir directrices nacionales, pero no puede seguir estando en manos de mandatos exclusivos del Presidente de la República. Toda la directiva de ese entonces renunció, salvo el representante sindical. En la UCV estuve 30 años, me jubilé en 1999. Desde 2005 ejerzo como invitado, funciones docentes y de investigación en la Universidad Simón Bolívar, en el Departamento de Planificación Urbana, y en el Instituto de Estudios Regionales –Urbanos (IERU)
¿Se pudo ejecutar algún proyecto importante durante su presidencia en Conavi?
No me gusta estar diciendo lo que hicimos, pero en el año 1992 fue el año cuando más viviendas se construyeron en el país desde 1928 –fecha de creación del Banco Obrero- hasta hoy. Se edificaron un total de 98.535 viviendas a nivel nacional. Nos faltaron 1465 para alcanzar las cacareadas cien mil. Se formó un equipo de trabajo técnico y político; con empresarios, constructores, sectores bancarios, ONG”s, comunidades organizadas, todos coordinados por el CONAVI, para desarrollar esos programas. [Ver gráficos. Los mismos fueron tomados del trabajo “El déficit y la producción formal de viviendas” en Linares, Alfonzo (2006)
Ejecutamos también en el estado Bolívar un programa experimental llamado Peghal, (Programa experimental de gestión habitacional local ) donde el centro era la participación de las comunidades en las construcciones de sus propias viviendas hasta de cuatro pisos.
Remuneramos el ahorro habitacional, que se veía mas como un impuesto. y se le otorgó en el presupuesto una cantidad significativa y creciente a la investigación en el sector.
Eliminamos el modelo mexicano, donde se pagaban cuotas crecientes, denominadas cuotas balón, porque se iban inflando, pero no así el salario, entonces era impagable. Eso lo luchamos mucho con el sector financiero y lo eliminamos. Era un programa nefasto para los compradores de vivienda: Hipotecados de por vida…
¿Cuáles fueron los logros más importantes del programa Peghal?
EL Peghal formó parte de los programas de estimulo a las organizaciones no gubernamentales y a las comunidades en su gestión habitacional .El fallecido y brillante arquitecto Henrique Hernández, fue quien dirigió el Peghal. Lamentablemente no se pudo seguir construyendo . Era un programa que tenía cada vez más posibilidades de avanzar, pero lo paralizó el golpe militar de Estado; después con los Presidentes interinos de Venezuela no se le puedo dar continuidad al proceso. Luego vino Rafael Caldera, quien lo liquidó desacertadamente con su ministro de Desarrollo Urbano: Ciro Zaa y sus asesores inmediatos.
¿De la Gran Caracas cuáles edificaciones resaltan de esas 98.535?
Muchas de las que se hicieron en Guarenas, Guatire, Altos mirandinos por constructores vinculados al sector pùblico y privado, quienes aportaron un porcentaje importante para la edificación en el área metropolitana de Caracas.
PLAN DE EMERGENCIA HABITACIONAL
¿El Plan de Emergencia Habitacional decretado recientemente por el Gobierno Nacional podría ser exitoso?
Es un Plan donde sólo se está mostrando la cabeza del iceberg. Existe una situación de desespero de parte del presidente Chávez y sus ministros con la vivienda debido a las innumerables promesas que no se han podido cumplir en estos doce años. Uno de los grandes fracasos de la actual administración es que creó demasiadas expectativas inconexas, sin planificación alguna, en los programas de viviendas y lamentablemente no pudieron cumplir. Es necesario hacer un recorrido por los múltiples planes que ha instrumentado y construido el Gobierno actual y ver los resultados. Todo lo contrario de lo que afanosamente indica el ministro Farruco con los resultados en la llamada IV República,.
¿Podría ofrecernos un balance de los mismos?
En 1999 se ejecutó el único programa potencialmente exitoso, el de habilitación de barrios. Fue un programa no convencional, estable y fundamentalmente integrado dentro de las ciudades que lo contenían. Ya dejaban de aplicarse programas puntuales en los barrios y sin articulación urbanística con la ciudad. Con el mismo se iniciaba la conducción del sector vivienda y desarrollo urbano, con una marcada presencia civil a través de dos profesionales de la ingeniería, de la arquitectura y el urbanismo, estrechamente vinculados al sector vivienda y con reconocida experiencia en el problema: el ingeniero Julio Montes, como Ministro de Infraestructura; y la arquitecta Josefina Baldó Ayala, en la Presidencia de Conavi.
Lamentablemente este enfoque no convencional fue malentendido, y menos compartido por algunos grupos de actores que dentro de la élite militar presentaron su resistencia, la cual pareciera haberse gestado inicialmente bajo la influencia de las ideas suscritas por el General Víctor Cruz Weffer. Su tesis en el campo de la vivienda, y especialmente en el tratamiento del problema de los barrios, se contraponía conceptual y políticamente con la previamente descrita. El Gral. CW por su formación militar concebía el problema de los barrios bajo un enfoque de seguridad nacional, inscrito en las amenazas que pueden significar los habitantes de los barrios ante tanta injusticia social.
Se define así un nuevo rumbo, pero ya no para enfrentar el gran problema de los pobres con la urbanización de sus barrios y menos el de parcelas urbanizadas con viviendas progresivas. Se crea entonces “El Plan Bolívar” donde prioriza la modalidad de sustituir los barrios por viviendas multifamiliares.
La Gestión militar, afortunadamente no pudo intervenir con ese enfoque de “desranchificar” las ciudades, pero sí intervino con su enfoque “viviendista”, construyendo solamente entre el año 2001 y 2003, 60.668 viviendas, incluyendo las aportadas mayoritariamente por el sector privado (65%). Esto demuestra la desmitificación de la supuesta eficiencia militar en la gerencia del sector de desarrollo urbano y la exigente necesidad de recurrir al sector privado de la construcción para adelantar los programas convencionales de producción habitacional.
Comienzan luego las Misiones en la vivienda, con los más variados y desarticulados programas urbanos, sin secuencia ni planificación alguna. Se sigue prioritariamente el trajinado e ineficaz concepto de la construcción de viviendas terminadas, completas, para luchar contra el creciente déficit habitacional.
Posteriormente se crea otro plan para reducir el déficit habitacional y se anuncia entre 1999 y 2010 , la construcción de cuarenta y siete nuevas ciudades . Igualmente se inician los convenios internacionales suscritos por el Gobierno con Argentina, Brasil, Cuba, China e Irán.
Luego, en el 2006 se decreta la aplicación de un “Plan de Emergencia en Vivienda y Hábitat”, donde se recalcan las acciones necesarias para agilizar la importación de materiales y la adquisición o expropiación de terrenos para la construcción de viviendas.
Y así siguieron planes y decretos de leyes que no tuvieron ningún éxito. Entre promesas y promesas la gente se frustró. Ahora están en espera de la última oportunidad: La Gran Misión Vivienda, que debemos pronto revisar para ver que se propone.
Con el aborto del proyecto de habilitación de los barrios se perdió entre otras cosas, la oportunidad de darle al pobre el estatus de ciudadanía, incorporándolos a los sectores formales de la ciudad. Entre proyectos muy puntuales y contratos que se otorgaron a la nueva boliburguesía de la construcción, se empezaron hacer desarrollos de viviendas aisladas de su contexto urbano, y en 11 años sólo se han construido 240 mil viviendas, que no necesariamente por su descontextualización urbanística, significan cuantitativa y cualitativamente, hacer y mejorar la ciudad.
Con el nuevo programa de emergencia habitacional donde aspiran construir 350.000 viviendas (2011-2012), el gobierno está tratando de recuperar su imagen en el sector vivienda, porque ésta es fundamental para las elecciones del 2012, pero considero que será otro esfuerzo no planificado, sin la organización gerencial conjunta entre el sector público y el privado, que exige esa cifra para cumplirla
Con estos antecedentes, la meta de construir 150.000 viviendas este año, 200.000 para el próximo, y de 2 millones para el 2018 es poco factible entonces
La meta en el lapso de siete años se puede llegar, y la han alcanzando muchos países, pero sólo cuando existe la conjunción eficiente y coordinada del sector público y privado. En las condiciones actuales es imposible hacer esa cantidad de viviendas. Eso es populismo, eso es crear nuevos espejismos, es jugar con los más pobres. No es una casualidad el plan de certificados de viviendas mientras las construyen. Es un chantaje, te dan la casa en el 2020 porque ese año el Gobierno actual piensa que puede seguir, pero como no pueden construir la casa todavía, se otorga un certificado: Un nuevo espejismo…
¿Los recientes convenios con China no hacen viable esa producción masiva de viviendas?
Los chinos sí tienen su buen lema: Si no hay LIAL no hay casa. Ellos contratan a 60mil dólares la vivienda, vienen aquí y contratan con algunos y escogidos constructores a la mitad. La diferencia de 100% es de ellos. Eso sí es capitalismo salvaje, hay que resaltar esto, dentro de un “sistema socialista”, supuestamente revolucionario…
Lo que desea el actual gobierno es eliminar la construcción privada, el sector inmobiliario, la industria privada. Eso se evidencia aún más con el nuevo proyecto de ley de alquileres, donde a un propietario le pueden confiscar la vivienda de la noche a la mañana. Todas las irregularidades que hay en el sector de alquiler puede y deben ser reguladas, de manera que propietarios e inquilinos tengan deberes y derechos a fin de evitar la especulación. Pero ese proyecto de ley es populismo puro, se ataca al propietario, porque mayoritariamente éste no está a favor del gobierno actual , y con los inquilinos hay más posibilidades de captarlos con el anzuelo de la propiedad, que paradójicamente desconocen en los nuevos desarrollos.. De esta manera se tiene cautivo a un importante grupo social para las próximas elecciones.
Panoramas posibles. Conjunción de lo público y lo privado
¿Cuáles soluciones podrían plantearse para solventar la crisis de vivienda? ¿Cómo ve el panorama habitacional del país?
No hay forma de adelantar unos programas masivos de viviendas si no hay incorporación creciente de los pobres al mercado de trabajo formal, y si no hay concertación entre el sector público, privado y las comunidades en los programas de más bajos ingresos. Pretender para el caso de las viviendas formales acabadas y completas, que las pueda hacer sólo el Ejecutivo, o con el poder comunal, es un ideal quimérico
Actualmente no hay esa incorporación laboral, ni estímulo al sector privado para apoyar los programas del Gobierno, todo lo contrario, el sector público está deshaciéndose cada vez más del sector privado nacional y de la construcción.
El sector privado debe convocar al sector constructor, inmobiliario, comunidades organizadas no alineadas al chavismo, y las universidades para pensar en la forma de trabajo post gobierno actual, ya, de inmediato. No podemos esperar que llegue el 2013 y no hayan pensado nada al respecto. Hay que plantearse qué hacer con un Estado donde el sector privado vuelva a entrar en el área de construcción; cuáles serían sus roles, los mecanismos, las estrategias, las formas de participación.
El sector de la construcción privada debe entender, e internalizar la importancia de los programas sociales claves para el país, como son la habilitación de los barrios y los programas de parcelas con servicios, tierra urbanizada. Si el sector privado no baja sus narices, no se involucra y no ve hacia abajo, estaremos nuevamente fracasados. El sector privado no puede volver a ocuparse como antes de un lucro creciente y sólo de un tipo de demanda solvente. Tiene que existir una correspondencia entre lo público y lo privado. El Estado subsidia parte de la demanda insolvente para que el privado construya y trabaje en programas sociales. Si esta correspondencia no se produce de parte del sector privado de la construcciòn , el Estado entonces no subsidiará y se dedicará exclusivamente al sector de menores ingresos, como le debe corresponder, porque no hay otra oferta complementaria socialmente por parte del privado.
Lo público y lo privado debe trabajar en conjunto, elaborar un abanico de programas, desde la parcela con servicios al edificio terminado de clase media. Se deben evaluar cuáles programas van hacer juntos, en dónde va haber más subsidio, qué va hacer cada sector. Esto es clave para el futuro de los dos sectores y las comunidades involucradas en esas decisiones
Cuando ese diálogo se de, porque ahora no existe , ni existirá en las condiciones autocráticas actuales, hay posibilidades de desarrollar un programa masivo de viviendas, un programa sano político y socialmente , que incorpore todos los estratos que demandan vivienda, tanto por carencias, mejoramiento o demanda real cuantitativa,
¿No cree que ese diálogo pueda existir con el Gobierno actual?
No tengo esperanzas con este gobierno, ya en 11 años se ha demostrado crecientemente que no hay posibilidades de diálogo. Hay exclusión creciente con la disidencia, con el pensamiento que busca democráticamente otras vías, para encontrar un nuevo gobierno que descentralice las decisiones en materia habitacional y desarrollo urbano. La vivienda es un problema local, y como tal, debe encararse y resolverse a ese nivel, con base en directrices nacionales. Mientras desde el gobierno esto se pregona en el verbo, en la práctica cada día avanzan lamentablemente con más fuerzas sólo los consejos comunales supeditados a los aportes financieros de la Presidencia de la República.
A manera de cierre
Después de este balance tan completo no queda duda que sería ideal un trabajo de planificación urbana articulado entre el sector público ,el privado y las comunidades involucradas en cada proyecto de construcción para que se aminore progresivamente el problema de la vivienda. No serían resultados inmediatistas, pero sí llegarían a generar planes y programas coordinados en el corto y mediano plazo , con ejemplos claros de demostración, evaluables, dentro de expectativas más factibles, no populistas , que conduzcan a enfrentar con la seriedad que requiere ,una realidad que urbanística y socialmente afecta a todos los venezolanos.
Balances y perspectivas habitacionales
Vanessa Ardila
“CONSTRUCTOR”.No 101. Mayo 2011
Publicación independiente propiedad de ediciones Constructor Report
Es arquitecto con maestría en planificación urbana (1968-1970) en la Architectural Association (conocida también como "AA School of Architecture") y un doctorado en la Universidad de Londres (1978-1982) nos recibió muy amablemente en su casa. Nos habló de su experiencia en la presidencia de Conavi y realizó un interesante análisis sobre la evolución en políticas habitacionales en los últimos años para finalmente brindarnos su perspectiva sobre el problema de vivienda en el país.
PRESIDENCIA CONAVI 1992-1994
¿Cómo llegó a la presidencia de Conavi?, ¿Por qué se retira?
El nombramiento fue muy circunstancial. Le agradeceré siempre al presidente Carlos Andrés Pérez, quien fue quien me nombró. Yo no era adeco ni activista político, simplemente era un miembro activo de la Academia ,y director del Conavi. En ese momento había enfrentamientos entre el sector constructor- inmobiliario y el político con respecto a quién debía ser el presidente de Conavi. Pérez salomónicamente buscó en la Academia para evitar conflictos. Yo trabaja en la Universidad Central de Venezuela (UCV), estaba en el directorio porque el ministro de Desarrollo Urbano de ese momento, Luis Penzini Fleury, me había propuesto en su lista de 1990. y cuando el Arq. Diógenes Mújica, sustituyo a Penzini , el Presidente Pérez me nombró como presidente del CONAVI, sustituyendo al Ing. Alfredo Laffee.
Se definieron buenos proyectos, pero vino el golpe militar de Estado y después tuvimos que renunciar porque el ministro de Desarrollo Urbano del gobierno de Rafael Caldera , Ciro Zaa, quería imponer la centralización de todas las acciones dentro de Conavi, cuando ya estábamos adelantando gestiones para descentralizar el sector vivienda hacia cada uno de los estados. El no podía destituirnos porque fuimos nombrados por decisión presidencial. Según el Ministro Zaa teníamos que centralizar porque no había experiencia en descentralización !!. Después de mi gestión en Conavi regresé a la universidad y a mi consultorìa privada.
La vivienda es un problema local, debe seguir directrices nacionales, pero no puede seguir estando en manos de mandatos exclusivos del Presidente de la República. Toda la directiva de ese entonces renunció, salvo el representante sindical. En la UCV estuve 30 años, me jubilé en 1999. Desde 2005 ejerzo como invitado, funciones docentes y de investigación en la Universidad Simón Bolívar, en el Departamento de Planificación Urbana, y en el Instituto de Estudios Regionales –Urbanos (IERU)
¿Se pudo ejecutar algún proyecto importante durante su presidencia en Conavi?
No me gusta estar diciendo lo que hicimos, pero en el año 1992 fue el año cuando más viviendas se construyeron en el país desde 1928 –fecha de creación del Banco Obrero- hasta hoy. Se edificaron un total de 98.535 viviendas a nivel nacional. Nos faltaron 1465 para alcanzar las cacareadas cien mil. Se formó un equipo de trabajo técnico y político; con empresarios, constructores, sectores bancarios, ONG”s, comunidades organizadas, todos coordinados por el CONAVI, para desarrollar esos programas. [Ver gráficos. Los mismos fueron tomados del trabajo “El déficit y la producción formal de viviendas” en Linares, Alfonzo (2006)
Ejecutamos también en el estado Bolívar un programa experimental llamado Peghal, (Programa experimental de gestión habitacional local ) donde el centro era la participación de las comunidades en las construcciones de sus propias viviendas hasta de cuatro pisos.
Remuneramos el ahorro habitacional, que se veía mas como un impuesto. y se le otorgó en el presupuesto una cantidad significativa y creciente a la investigación en el sector.
Eliminamos el modelo mexicano, donde se pagaban cuotas crecientes, denominadas cuotas balón, porque se iban inflando, pero no así el salario, entonces era impagable. Eso lo luchamos mucho con el sector financiero y lo eliminamos. Era un programa nefasto para los compradores de vivienda: Hipotecados de por vida…
¿Cuáles fueron los logros más importantes del programa Peghal?
EL Peghal formó parte de los programas de estimulo a las organizaciones no gubernamentales y a las comunidades en su gestión habitacional .El fallecido y brillante arquitecto Henrique Hernández, fue quien dirigió el Peghal. Lamentablemente no se pudo seguir construyendo . Era un programa que tenía cada vez más posibilidades de avanzar, pero lo paralizó el golpe militar de Estado; después con los Presidentes interinos de Venezuela no se le puedo dar continuidad al proceso. Luego vino Rafael Caldera, quien lo liquidó desacertadamente con su ministro de Desarrollo Urbano: Ciro Zaa y sus asesores inmediatos.
¿De la Gran Caracas cuáles edificaciones resaltan de esas 98.535?
Muchas de las que se hicieron en Guarenas, Guatire, Altos mirandinos por constructores vinculados al sector pùblico y privado, quienes aportaron un porcentaje importante para la edificación en el área metropolitana de Caracas.
PLAN DE EMERGENCIA HABITACIONAL
¿El Plan de Emergencia Habitacional decretado recientemente por el Gobierno Nacional podría ser exitoso?
Es un Plan donde sólo se está mostrando la cabeza del iceberg. Existe una situación de desespero de parte del presidente Chávez y sus ministros con la vivienda debido a las innumerables promesas que no se han podido cumplir en estos doce años. Uno de los grandes fracasos de la actual administración es que creó demasiadas expectativas inconexas, sin planificación alguna, en los programas de viviendas y lamentablemente no pudieron cumplir. Es necesario hacer un recorrido por los múltiples planes que ha instrumentado y construido el Gobierno actual y ver los resultados. Todo lo contrario de lo que afanosamente indica el ministro Farruco con los resultados en la llamada IV República,.
¿Podría ofrecernos un balance de los mismos?
En 1999 se ejecutó el único programa potencialmente exitoso, el de habilitación de barrios. Fue un programa no convencional, estable y fundamentalmente integrado dentro de las ciudades que lo contenían. Ya dejaban de aplicarse programas puntuales en los barrios y sin articulación urbanística con la ciudad. Con el mismo se iniciaba la conducción del sector vivienda y desarrollo urbano, con una marcada presencia civil a través de dos profesionales de la ingeniería, de la arquitectura y el urbanismo, estrechamente vinculados al sector vivienda y con reconocida experiencia en el problema: el ingeniero Julio Montes, como Ministro de Infraestructura; y la arquitecta Josefina Baldó Ayala, en la Presidencia de Conavi.
Lamentablemente este enfoque no convencional fue malentendido, y menos compartido por algunos grupos de actores que dentro de la élite militar presentaron su resistencia, la cual pareciera haberse gestado inicialmente bajo la influencia de las ideas suscritas por el General Víctor Cruz Weffer. Su tesis en el campo de la vivienda, y especialmente en el tratamiento del problema de los barrios, se contraponía conceptual y políticamente con la previamente descrita. El Gral. CW por su formación militar concebía el problema de los barrios bajo un enfoque de seguridad nacional, inscrito en las amenazas que pueden significar los habitantes de los barrios ante tanta injusticia social.
Se define así un nuevo rumbo, pero ya no para enfrentar el gran problema de los pobres con la urbanización de sus barrios y menos el de parcelas urbanizadas con viviendas progresivas. Se crea entonces “El Plan Bolívar” donde prioriza la modalidad de sustituir los barrios por viviendas multifamiliares.
La Gestión militar, afortunadamente no pudo intervenir con ese enfoque de “desranchificar” las ciudades, pero sí intervino con su enfoque “viviendista”, construyendo solamente entre el año 2001 y 2003, 60.668 viviendas, incluyendo las aportadas mayoritariamente por el sector privado (65%). Esto demuestra la desmitificación de la supuesta eficiencia militar en la gerencia del sector de desarrollo urbano y la exigente necesidad de recurrir al sector privado de la construcción para adelantar los programas convencionales de producción habitacional.
Comienzan luego las Misiones en la vivienda, con los más variados y desarticulados programas urbanos, sin secuencia ni planificación alguna. Se sigue prioritariamente el trajinado e ineficaz concepto de la construcción de viviendas terminadas, completas, para luchar contra el creciente déficit habitacional.
Posteriormente se crea otro plan para reducir el déficit habitacional y se anuncia entre 1999 y 2010 , la construcción de cuarenta y siete nuevas ciudades . Igualmente se inician los convenios internacionales suscritos por el Gobierno con Argentina, Brasil, Cuba, China e Irán.
Luego, en el 2006 se decreta la aplicación de un “Plan de Emergencia en Vivienda y Hábitat”, donde se recalcan las acciones necesarias para agilizar la importación de materiales y la adquisición o expropiación de terrenos para la construcción de viviendas.
Y así siguieron planes y decretos de leyes que no tuvieron ningún éxito. Entre promesas y promesas la gente se frustró. Ahora están en espera de la última oportunidad: La Gran Misión Vivienda, que debemos pronto revisar para ver que se propone.
Con el aborto del proyecto de habilitación de los barrios se perdió entre otras cosas, la oportunidad de darle al pobre el estatus de ciudadanía, incorporándolos a los sectores formales de la ciudad. Entre proyectos muy puntuales y contratos que se otorgaron a la nueva boliburguesía de la construcción, se empezaron hacer desarrollos de viviendas aisladas de su contexto urbano, y en 11 años sólo se han construido 240 mil viviendas, que no necesariamente por su descontextualización urbanística, significan cuantitativa y cualitativamente, hacer y mejorar la ciudad.
Con el nuevo programa de emergencia habitacional donde aspiran construir 350.000 viviendas (2011-2012), el gobierno está tratando de recuperar su imagen en el sector vivienda, porque ésta es fundamental para las elecciones del 2012, pero considero que será otro esfuerzo no planificado, sin la organización gerencial conjunta entre el sector público y el privado, que exige esa cifra para cumplirla
Con estos antecedentes, la meta de construir 150.000 viviendas este año, 200.000 para el próximo, y de 2 millones para el 2018 es poco factible entonces
La meta en el lapso de siete años se puede llegar, y la han alcanzando muchos países, pero sólo cuando existe la conjunción eficiente y coordinada del sector público y privado. En las condiciones actuales es imposible hacer esa cantidad de viviendas. Eso es populismo, eso es crear nuevos espejismos, es jugar con los más pobres. No es una casualidad el plan de certificados de viviendas mientras las construyen. Es un chantaje, te dan la casa en el 2020 porque ese año el Gobierno actual piensa que puede seguir, pero como no pueden construir la casa todavía, se otorga un certificado: Un nuevo espejismo…
¿Los recientes convenios con China no hacen viable esa producción masiva de viviendas?
Los chinos sí tienen su buen lema: Si no hay LIAL no hay casa. Ellos contratan a 60mil dólares la vivienda, vienen aquí y contratan con algunos y escogidos constructores a la mitad. La diferencia de 100% es de ellos. Eso sí es capitalismo salvaje, hay que resaltar esto, dentro de un “sistema socialista”, supuestamente revolucionario…
Lo que desea el actual gobierno es eliminar la construcción privada, el sector inmobiliario, la industria privada. Eso se evidencia aún más con el nuevo proyecto de ley de alquileres, donde a un propietario le pueden confiscar la vivienda de la noche a la mañana. Todas las irregularidades que hay en el sector de alquiler puede y deben ser reguladas, de manera que propietarios e inquilinos tengan deberes y derechos a fin de evitar la especulación. Pero ese proyecto de ley es populismo puro, se ataca al propietario, porque mayoritariamente éste no está a favor del gobierno actual , y con los inquilinos hay más posibilidades de captarlos con el anzuelo de la propiedad, que paradójicamente desconocen en los nuevos desarrollos.. De esta manera se tiene cautivo a un importante grupo social para las próximas elecciones.
Panoramas posibles. Conjunción de lo público y lo privado
¿Cuáles soluciones podrían plantearse para solventar la crisis de vivienda? ¿Cómo ve el panorama habitacional del país?
No hay forma de adelantar unos programas masivos de viviendas si no hay incorporación creciente de los pobres al mercado de trabajo formal, y si no hay concertación entre el sector público, privado y las comunidades en los programas de más bajos ingresos. Pretender para el caso de las viviendas formales acabadas y completas, que las pueda hacer sólo el Ejecutivo, o con el poder comunal, es un ideal quimérico
Actualmente no hay esa incorporación laboral, ni estímulo al sector privado para apoyar los programas del Gobierno, todo lo contrario, el sector público está deshaciéndose cada vez más del sector privado nacional y de la construcción.
El sector privado debe convocar al sector constructor, inmobiliario, comunidades organizadas no alineadas al chavismo, y las universidades para pensar en la forma de trabajo post gobierno actual, ya, de inmediato. No podemos esperar que llegue el 2013 y no hayan pensado nada al respecto. Hay que plantearse qué hacer con un Estado donde el sector privado vuelva a entrar en el área de construcción; cuáles serían sus roles, los mecanismos, las estrategias, las formas de participación.
El sector de la construcción privada debe entender, e internalizar la importancia de los programas sociales claves para el país, como son la habilitación de los barrios y los programas de parcelas con servicios, tierra urbanizada. Si el sector privado no baja sus narices, no se involucra y no ve hacia abajo, estaremos nuevamente fracasados. El sector privado no puede volver a ocuparse como antes de un lucro creciente y sólo de un tipo de demanda solvente. Tiene que existir una correspondencia entre lo público y lo privado. El Estado subsidia parte de la demanda insolvente para que el privado construya y trabaje en programas sociales. Si esta correspondencia no se produce de parte del sector privado de la construcciòn , el Estado entonces no subsidiará y se dedicará exclusivamente al sector de menores ingresos, como le debe corresponder, porque no hay otra oferta complementaria socialmente por parte del privado.
Lo público y lo privado debe trabajar en conjunto, elaborar un abanico de programas, desde la parcela con servicios al edificio terminado de clase media. Se deben evaluar cuáles programas van hacer juntos, en dónde va haber más subsidio, qué va hacer cada sector. Esto es clave para el futuro de los dos sectores y las comunidades involucradas en esas decisiones
Cuando ese diálogo se de, porque ahora no existe , ni existirá en las condiciones autocráticas actuales, hay posibilidades de desarrollar un programa masivo de viviendas, un programa sano político y socialmente , que incorpore todos los estratos que demandan vivienda, tanto por carencias, mejoramiento o demanda real cuantitativa,
¿No cree que ese diálogo pueda existir con el Gobierno actual?
No tengo esperanzas con este gobierno, ya en 11 años se ha demostrado crecientemente que no hay posibilidades de diálogo. Hay exclusión creciente con la disidencia, con el pensamiento que busca democráticamente otras vías, para encontrar un nuevo gobierno que descentralice las decisiones en materia habitacional y desarrollo urbano. La vivienda es un problema local, y como tal, debe encararse y resolverse a ese nivel, con base en directrices nacionales. Mientras desde el gobierno esto se pregona en el verbo, en la práctica cada día avanzan lamentablemente con más fuerzas sólo los consejos comunales supeditados a los aportes financieros de la Presidencia de la República.
A manera de cierre
Después de este balance tan completo no queda duda que sería ideal un trabajo de planificación urbana articulado entre el sector público ,el privado y las comunidades involucradas en cada proyecto de construcción para que se aminore progresivamente el problema de la vivienda. No serían resultados inmediatistas, pero sí llegarían a generar planes y programas coordinados en el corto y mediano plazo , con ejemplos claros de demostración, evaluables, dentro de expectativas más factibles, no populistas , que conduzcan a enfrentar con la seriedad que requiere ,una realidad que urbanística y socialmente afecta a todos los venezolanos.
domingo, 27 de febrero de 2011
Gestión Vivienda Miranda 2009-2010
En la presentación anexa podrás revisar el trabajo de un equipo de gobierno comprometido con el pueblo mirandino. Ve a esta dirección http://foroviviendafau.blogspot.com/p/ponencias.html
Clikea Experiencia en el sector Público: Gobierno de Miranda.
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